Celebrar el cumple de tu hijo en casa y que todo sea un éxito
Hoy es el cumpleaños de mi hijo mayor, cumple 8 añitos.
Un día muy especial por muchas cosas, primero porque el día en que nació me hizo la mamá más feliz del mundo y segundo, porque lo celebramos el pasado viernes con sus amigos y fue todo un éxito! Así que hoy me siento más relajada y con tiempo para poder contároslo todo!!
¿El secreto de mi éxito? Lo hice feliz celebrando el cumple en casa, abriendo las puertas a los amigos y a los papás de los amigos y haciendo para ellos, lo que mejor se me da... mimarlos!!
Os confieso que decidir hacerlo en casa fue al principio todo un trauma, porque sabía el trabajo que tenía por delante, pero después de la experiencia, lo recomiendo a todos los papás y mamás, porque hemos recuperado esa alegría y convivencia que de pequeña yo recordaba en mis cumpleaños y en el de mis hermanos y amigos.
Deberíamos propiciar estas celebraciones mucho más, porque los niños comparten con muchas más facilidad momentos que no pueden compartir en un salón de celebraciones de cumpleaños al uso ya que los tiempos y los espacios son los que son y no pueden estirarse; porque para ellos, el poder estar en su casa con sus amigos siendo además el protagonista ese día, es una verdadera pasada y porque han vivido de primera mano cada paso que se iba dando con los preparativos y las sorpresas que estábamos preparando juntos! Ser partícipe para mi hijo en la preparación de su cumple ha sido increíble. Una experiencia que quiere repetir. :)
Os cuento qué cosas hice y cómo lo hice, para que pudieran venir cuantos más amigos mejor y me saliera lo más económico posible.
Convencer a tu hijo de que celebrarlo en casa es la mejor opción
Primero tuve que convencer a mi hijo de que su cumple lo celebraríamos en casa.
Por contra tenía que todos sus amigos lo habían celebrado siempre en un salón de juegos habilitado para ello, con las atracciones y animadores pertinentes, y mi hijo venía desde hace tiempo diciéndome que lo celebrase en el mismo lugar... Yo contaba con grandes puntos a favor: que soy una manitas en la cocina y haciendo que cualquier cartón o papel, se conviertan en un juego súper divertido y que cuando me propongo algo, lo consigo!
Le prometí que jamás iba a olvidar este cumple y que iba a ser el más divertido de su vida, para él y sus amigos. Le pedí que confiara en mí y que necesitaba que lo preparase todo mano a mano conmigo y que eligiera la temática del cumple, que eso era tema suyo. Eligió los Teen Titans Go.
Reto superado! No vió mejor opción.
Él mismo estaba tan ilusionado con cada paso que íbamos dando que contagió a sus amigos, que acabaron por pedir a sus padres que querían celebrarlo en casa también! Genial, no?
Decidir el día y preparar con bastante tiempo todo
Con dos semanas por delante... hicimos un listado de amigos, pudo invitar no a 10, como suele ser la media de cualquier salón de juegos para niños, sino a 16 niños!! Os hacéis una idea?
Consulté a los papis si ese día les venía bien, y como así fue, preparamos lo primero las invitaciones. Con un programita de diseño, las hice, con los personajes de Teen Titans Go y las repartió con una semana y poco más de antelación.
Comencé a planificar todo lo que quería que no faltase: Caretas de los personajes, una gran tarta de chuches, una piñata personalizada, tarta de bizcocho, una Gymkana con juegos y regalos, bolsas regalo para los asistentes, una mesa repleta de chuches, una buena merienda, muchas bebidas y una mesa para los papis con comida y bebida.
Hacer con antelación las manualidades y que sea una merienda muy completita
Sabía que quedaba muchísimo camino por delante y mucho trabajo, pero planifiqué cada día lo que tenía que hacer para no andar agobiada.
Comprobé los materiales que tenía y los que necesitaba comprar para las manualidades. Compré las chuches con previsión y comparé dónde eran más económicas, porque iba a necesitar muchas para la tarta y llenar la mesa! Compramos además de las chuches de la tarta y la piñata y las bolsitas regalo, una caja de bebidas de colores en botellitas pequeñas y una caja de lenguas de azúcar de arco iris... No dejaron ni el ruido!!!
Organizamos juntos los juegos que queríamos que formaran parte de la Gymkana y me puse manos a la obra con la pesca de patitos, tirar a gol, hacer diana, lanzar a dar a las latas, encestar a baloncesto... en fin, todo elaborado a mano con cariño y tiempo!
Así quedaron la piñata, tarta de chuches y bolsitas regalo, aparte de confesaros que estuve tan a tope para que todo saliera perfecto, jugando y atendiendo a los peques y a los padres, que apenas pude hacer fotos de las mesas antes de la llegada para que veáis cómo quedó! Si consigo fotos de los demás papis, os las comparto! Por lo pronto os muestro algunas de las fotos que tengo :)
La merienda fue fantástica, perritos calientes y pizzas, que les encantan, patatas fritas. Para los papis un variado, saladitos, empanada, tortilla de patatas, quesos, patés...
Los peques salieron contentísimos y se lo pasaron pipa, los papás quedamos muy satisfechos y compartimos momentos que las prisas nos obligan a dejar a un lado y la comodidad de que nos lo den todo hecho nos priva de estos ratitos tan sabrosos.
Os animo a potenciar estas celebraciones en casa, porque os confieso que no es todo lo que puse, sino todo lo que disfrutaron.
Moraleja: Jugaron sobre todo a pescar patos y a fútbol, comieron muchísimo y salieron muy contentos de casa. Los peques no atendieron tanto a la decoración y muchos dejaron atrás sus caretas. Ellos quieren jugar y comer muuuuucho. Lo demás, les sobra, y me alegro!!!! ;)
Un día muy especial por muchas cosas, primero porque el día en que nació me hizo la mamá más feliz del mundo y segundo, porque lo celebramos el pasado viernes con sus amigos y fue todo un éxito! Así que hoy me siento más relajada y con tiempo para poder contároslo todo!!
¿El secreto de mi éxito? Lo hice feliz celebrando el cumple en casa, abriendo las puertas a los amigos y a los papás de los amigos y haciendo para ellos, lo que mejor se me da... mimarlos!!
Os confieso que decidir hacerlo en casa fue al principio todo un trauma, porque sabía el trabajo que tenía por delante, pero después de la experiencia, lo recomiendo a todos los papás y mamás, porque hemos recuperado esa alegría y convivencia que de pequeña yo recordaba en mis cumpleaños y en el de mis hermanos y amigos.
Deberíamos propiciar estas celebraciones mucho más, porque los niños comparten con muchas más facilidad momentos que no pueden compartir en un salón de celebraciones de cumpleaños al uso ya que los tiempos y los espacios son los que son y no pueden estirarse; porque para ellos, el poder estar en su casa con sus amigos siendo además el protagonista ese día, es una verdadera pasada y porque han vivido de primera mano cada paso que se iba dando con los preparativos y las sorpresas que estábamos preparando juntos! Ser partícipe para mi hijo en la preparación de su cumple ha sido increíble. Una experiencia que quiere repetir. :)
Os cuento qué cosas hice y cómo lo hice, para que pudieran venir cuantos más amigos mejor y me saliera lo más económico posible.
Convencer a tu hijo de que celebrarlo en casa es la mejor opción
Primero tuve que convencer a mi hijo de que su cumple lo celebraríamos en casa.
Por contra tenía que todos sus amigos lo habían celebrado siempre en un salón de juegos habilitado para ello, con las atracciones y animadores pertinentes, y mi hijo venía desde hace tiempo diciéndome que lo celebrase en el mismo lugar... Yo contaba con grandes puntos a favor: que soy una manitas en la cocina y haciendo que cualquier cartón o papel, se conviertan en un juego súper divertido y que cuando me propongo algo, lo consigo!
Le prometí que jamás iba a olvidar este cumple y que iba a ser el más divertido de su vida, para él y sus amigos. Le pedí que confiara en mí y que necesitaba que lo preparase todo mano a mano conmigo y que eligiera la temática del cumple, que eso era tema suyo. Eligió los Teen Titans Go.
Reto superado! No vió mejor opción.
Él mismo estaba tan ilusionado con cada paso que íbamos dando que contagió a sus amigos, que acabaron por pedir a sus padres que querían celebrarlo en casa también! Genial, no?
Decidir el día y preparar con bastante tiempo todo
Con dos semanas por delante... hicimos un listado de amigos, pudo invitar no a 10, como suele ser la media de cualquier salón de juegos para niños, sino a 16 niños!! Os hacéis una idea?
Consulté a los papis si ese día les venía bien, y como así fue, preparamos lo primero las invitaciones. Con un programita de diseño, las hice, con los personajes de Teen Titans Go y las repartió con una semana y poco más de antelación.
Comencé a planificar todo lo que quería que no faltase: Caretas de los personajes, una gran tarta de chuches, una piñata personalizada, tarta de bizcocho, una Gymkana con juegos y regalos, bolsas regalo para los asistentes, una mesa repleta de chuches, una buena merienda, muchas bebidas y una mesa para los papis con comida y bebida.
Hacer con antelación las manualidades y que sea una merienda muy completita
Sabía que quedaba muchísimo camino por delante y mucho trabajo, pero planifiqué cada día lo que tenía que hacer para no andar agobiada.
Organizamos juntos los juegos que queríamos que formaran parte de la Gymkana y me puse manos a la obra con la pesca de patitos, tirar a gol, hacer diana, lanzar a dar a las latas, encestar a baloncesto... en fin, todo elaborado a mano con cariño y tiempo!
Así quedaron la piñata, tarta de chuches y bolsitas regalo, aparte de confesaros que estuve tan a tope para que todo saliera perfecto, jugando y atendiendo a los peques y a los padres, que apenas pude hacer fotos de las mesas antes de la llegada para que veáis cómo quedó! Si consigo fotos de los demás papis, os las comparto! Por lo pronto os muestro algunas de las fotos que tengo :)
La merienda fue fantástica, perritos calientes y pizzas, que les encantan, patatas fritas. Para los papis un variado, saladitos, empanada, tortilla de patatas, quesos, patés...
Los peques salieron contentísimos y se lo pasaron pipa, los papás quedamos muy satisfechos y compartimos momentos que las prisas nos obligan a dejar a un lado y la comodidad de que nos lo den todo hecho nos priva de estos ratitos tan sabrosos.
Os animo a potenciar estas celebraciones en casa, porque os confieso que no es todo lo que puse, sino todo lo que disfrutaron.
Moraleja: Jugaron sobre todo a pescar patos y a fútbol, comieron muchísimo y salieron muy contentos de casa. Los peques no atendieron tanto a la decoración y muchos dejaron atrás sus caretas. Ellos quieren jugar y comer muuuuucho. Lo demás, les sobra, y me alegro!!!! ;)
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